Una de las cirugías que últimamente gana acogida entre el género femenino  es la del rejuvenecimiento vaginal. En años anteriores, esta cirugía era poco conocida en nuestro país; sin embargo, por este tiempo empieza a tomar relevancia no sólo por un tema  estético sino también para tener una mejor vida sexual.

Según explica el ginecólogo Enrique Flint, de la Clínica San Felipe, la cirugía de rejuvenecimiento vaginal consiste en un estrechamiento de la vagina, lo cual permitirá después una mayor fricción al momento de tener relaciones sexuales, aumentando así la sensación de placer para ambas partes.

"Es una intervención reconstructiva que debe ser hecha por los ginecólogos, pues cuentan con experiencia necesaria en la anatomía de la zona. En ese tipo de operaciones se trabaja a milímetros del recto, y es posible provocar lesiones como perforaciones o fístulas si no se actúa con el debido cuidado", añade Flint.

En el caso de las mujeres con labios vulvares asimétricos o prominentes (que abulten el bikini), esta intervención es ideal.

"Para eso el procedimiento es sencillo, con anestesia local, y se obtiene un buen resultado", cuenta el especialista.

Otro de los motivos que llevan a las mujeres a someterse a esta cirugía es que varias de ellas, luego de dar a luz, presentan una rotura en los tejidos que sostienen la vagina, haciendo que ésta se dilate demasiado y se dé el prolapso, que es una caída de los órganos pélvicos (útero, vejiga y recto) y que puede producir problemas ya no sólo estéticos sino de salud, como escape de orina al toser o estreñimiento crónico, entre otras dificultades que afectan la calidad de vida.

Lo que es importante tener en cuenta, agrega Flint, es que esta operación no arregla matrimonios ni salva relaciones. No es la solución para parejas que estén mal; por el contrario, es para parejas que se encuentren bien y que quieran mejorar su vida sexual.

Es un procedimiento sencillo y usted puede retomar su vida normal casi de forma inmediata; eso sí, no podrá tener relaciones sexuales por un breve lapso.

"Lo recomendable es que durante 6 u 8 semanas eviten la intimidad con la pareja; luego, los resultados serán muy favorables", señala.

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