El animal se desplomó de repente y ya no se paró más. El jinete, que era su compañero por más de dos años, evitó mirar a su entrañable amigo

Un lamentable hecho ocurrió ayer, en el camino al estadio Monumental donde se jugaba la final del fútbol peruano , y no se debió a un acto de violencia entre barras o algo similar.

Mientras la Policía Montada se encontraba cumpliendo con su labor de brindar seguridad, uno de los caballos -con el jinete encima- se desplomó de repente, en la intersección de las avenidas La Molina y Javier Prado.

Los efectivos ayudaron al jinete y al animal a pararse, pero el animal solo lo hizo por unos minutos y volvió a desplomarse. Murió en el instante.

El caballo, un ejemplar argentino de nombre “Licor”, que pesaba casi media tonelada, fue retirado por los policías quienes lo subieron a un camión que sirvió de carroza fúnebre.

El oficial que lo montaba desde hace dos años, José Mendoza, evitó mirar a su entrañable amigo.
Aparentemente murió por un paro cardiaco.