Totalmente fuera de sí, la muchacha escupió, insultó, pateó y mordió a los policías en la comisaría de Surquillo. Destruyó computadora e impresora.

Al mismo estilo de una ex trabajadora del Poder Judicial, una mujer protagonizó un escándalo en una comisaría de Surquillo en completo estado de ebriedad.

Fuera de sí, Giovanna Livia Machacuay Barrera, de aproximadamente treinta años, fue detenida cuando alteraba el orden público en la vía pública, en una tienda de autos. “Estaba chancando la puerta con su taco y estaba agrediendo al guachimán”, declaró la suboficial Dolores Ibarra Salas.

Eso no fue todo. En la sede policial escupió, pateó y mordió a otros suboficiales, profiriendo frases de grueso calibre. Además, destruyó una computadora y la impresora a golpes y patadas. También golpeó a un taxista.
La Polícia esperó que a Machacuay le pase los efectos del alcohol para recién poder tomarle su manifestación y hacerle la denuncia.