Estar tantas horas fuera de casa y pasar casi la mayor parte del día en el trabajo ha hecho que miles de personas se fijen en sus compañeros de trabajo, algunos han tenido un romance oculto y pasajero, y otros han encontrado al amor de su vida en la misma oficina en que la conocieron.


Lo anterior, se hace notorio en una reveladora encuesta realizada por trabajando.com a más de 2 mil personas, donde el 61% de ellas aseguró no estar de acuerdo con los romances entre compañeros de labores. Sólo un 39% las aprueba.

A la pregunta ¿has tenido algún romance en el trabajo?, un 29% reconoció que no ha tenido una relación de este tipo, pero que no le importaría tenerla; un 28% afirmó no haber tenido una relación de este tipo, asegurando que jamás la tendría. Mientras, un 16% señaló que si ha tenido un amorío en el trabajo, pero oculto; otro 15% también lo reconoce pero agrega que esta relación ya terminó. Finalmente, el 11% restante tiene hoy un romance en su oficina.

Estar enamorado es sinónimo de felicidad y buenos momentos, pero las cosas se complican cuando la relación es entre jefe y empleado. Cuando existe otro tipo de sentimientos en una relación de dependencia de cargos, puede ser más difícil mantener la objetividad en la evaluación de desempeño o evitar que se mal interpreten las oportunidades laborales de quien ocupaba un cargo menor.

Fuente: Terra