Un escándalo ha envuelto a la exitosa serie televisiva “House”. Según el portal web TMZ, un ex miembro de su producción ha denunciado que en los estudios de grabación de la ficción circulaban drogas, alcohol, armas y sexo.

El ex trabajador de la cadena Fox, identificado como Carl Jones y despedido en marzo pasado por no estar de acuerdo con estas conductas de sus superiores, ha solicitado ante el Tribunal Supremo de la ciudad de Los Ángeles una indemnización de un millón de dólares por depresión y daños físicos.

Según él, en el estudio de “House” se desarrollaba un ambiente enfermizo con frecuentes borracheras, consumo de drogas y sexo en los diferentes ambientes. Además, se concretaban visitas a bares de nudistas. Añadió que él recibía presiones por negarse a participar en estas actividades.

Jones también contó que sus jefes se dirigían a él y a sus compañeros en tono déspota y hasta con lisuras. Además, reveló que no solo reinaban los excesos, sino también la locura y el peligro inminente, ya que en varias ocasiones uno de superiores llevó una pistola al set y tras embriagarse “se metió en la piel de un lanzador de cuchillos como pasatiempo improvisado”.