Imágenes presentadas en el programa de María Elvira Salazar en Mega TV, muestran a los cantantes entre lágrimas y muy molestos poco antes de que se iniciara el show en La Habana. Se ve a Juanes molesto y amenazando con cancelar todo el evento si los representantes del Gobierno cubano no cedían y permitían el acceso libre a las zonas preferenciales de la Plaza de la Revolución.
La prensa señaló que había gente, la mayoría hijos de funcionarios o gente del partido de gobierno, que portaba boletos azules y pulsera para entrar en una zona VIP y tener acceso al backstage, algo que causó la indignación de los artistas, que levantaron su voz de protesta y ganaron.
El colombiano repite una y otra vez la frase: “Estamos muy molestos”, siendo secundado por Miguel Bosé, quien empieza a quejarse ante los funcionarios de que han cumplido con todo los que les han pedido para la realización del evento, y soportado las constantes acusaciones de que apoyan a políticos contrarios al régimen comunista.
Juanes y Bosé estaban decididos a cancelar todo si es que los funcionarios cubanos no dejaban de ponerles trabas. Sin embargo, Yotuel Romero, un miembro de Los Orishas, logró calmar al colombiano y a sus compañeros. “Si paramos ahora habrán ganado ellos”, asegura, refiriéndose a las autoridades de la isla.
Los funcionarios cedieron ante la amenaza de suspensión del concierto y accedieron a que el ingreso fuera libre. Los artistas ganaron y le regalaron al pueblo cubano un concierto memorable.
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