Papá Noel y los Reyes Magos de Oriente se apretarán el cinturón estas Navidades y recurrirán al juguete tradicional para que ningún niño se quede sin jugar a pesar de la crisis económica.
Los juguetes clásicos, muñecas y figuras de acción, vuelven con fuerza porque son más baratos y porque la crisis hace que los padres busquen el "regalo correcto, no el más caro o extravagante".
Así, las jugueterías se llenarán de productos que hicieron las delicias de otras generaciones, aunque reinventados.
Según Pastor, el juguete tradicional cobra importancia también porque los padres conciben hoy en día el juego como una necesidad y estos productos permiten un desarrollo cognitivo más creativo e imaginativo.
Cada año, afirma el director de AEFJ, el sector cambia el 60 por ciento de su catálogo y este año la innovación ha estado dirigida por una política de reducción de costes y de creación de juguetes más sencillos para que el precio final del producto sea competitivo en un contexto de dificultades económicas.
Los embalajes son más pequeños y las unidades básicas más simples, pudiéndose complementar con otros productos que se venderán por separado.
"Los Reyes Magos al final siempre vienen, por eso son magos, y si no traen diez juguetes, serán ocho. En lugar de costar 60 euros a lo mejor serán de 35 euros. Pero el juego es una necesidad y los padres lo saben".
JUGUETES POR SEXOS
El sector podrá adaptarse a la crisis pero algo que no cambia, por mucho que pase el tiempo, es la diferenciación de los juguetes por sexos.
Entre las apuestas de temporada presentadas hoy predominan los colores pastel en bebés, animales que requieren los cuidados de las niñas y coches y figuras de acción en tonos rojos y negros destinados a los niños.
Para el director de AEFJ, no son los fabricantes los que han de modernizar los juguetes que no están orientados en función del sexo, sino los consumidores los que han de transmitir mensajes libres de sexismo a los pequeños.
La patronal sostiene que durante los tres primeros trimestres del año, los precios de los juguetes bajaron un 2,7 por ciento y las ventas descendieron un 1,1 por ciento.
Sin embargo, no reducirá su inversión publicitaria para la campaña navideña porque en esa época recauda el 60 por ciento de su facturación.
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