Inexplicablmente, el mecanismo que mantiene apagado el electrodoméstico cuando la puerta está abierta no ha funcionado y el niño ha visto cómo las aspas del electrodoméstico le han cortado el brazo.
Asustados, los chicos cogieron el brazo, lo guardaron en una toalla y rápidamente se fueron a la cama. A la mañana siguiente la madre fue a llamarle para ir al colegio y se dio cuenta del trágico suceso.
La ambulancia que lo llevó al hospital tardó tan poco que pudo mantener al niño con vida. Sin embargo, los médicos no pudieron coserle el brazo, según publica hoy el diario alemán 'Bild'.
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