Un grupo de hampones armados ingresó a un local de La Victoria cuando ya no habían clientes y se enfrentó a tiros con la Policía. No hubo heridos.

Una noche de terror. Eso fue lo que vivieron los empleados de la tienda de comida rápida de la cadena KFC, ubicada en el cruce de las avenidas Canadá y Nicolás Arriola, en La Victoria. Un grupo de delincuentes armados ingresó al local, que ya había cerrado y no tenía clientes, para llevarse las ganancias del día.

En ese momento, apareció en el lugar una patrulla de la Policía y se desató una feroz balacera que terminó con varias ventanas rotas en tiendas y casas aledañas. Los trabajadores se tiraron al piso y ninguno resultó herido, pero una empleada se desmayó por el susto, informó el noticiero Primera Edición.

El atracó se frustró y los delincuentes lograron huir a bordo de un auto de marca Mitsubishi con lunas polarizados, según dijeron algunos testigos del hecho. Los hampones abandonaron una pistola, que es ahora una de las pistas para dar con su paradero.