En San Miguel de Tucumán, en la pampa argentina, el español Carlos Sainz y el francés Cyril Despres se frotan las manos, pues tras los dos primeros días del Rally Dakar 2011 son los líderes indiscutibles en las categorías principales, la de autos y motos.

Los campeones del año pasado no han tenido que esperar a las etapas largas, sino que ya desde el inicio de la esperada maratón automovilística están en la punta.

En tanto, en Lima, las autoridades del Instituto Peruano del Deporte (IPD) y el Automóvil Club Peruano ya respiran tranquilas. Tras una reunión sostenida ayer entre Arturo Woodman, el jefe del IPD, y el presidente de la República, Alan García, se firmó el compromiso del Gobierno mediante el cual el Estado se compromete a declarar de interés nacional la venida del convoy del Dakar hasta Lima en la edición del próximo año. Una noticia así, aun cuando falten 12 meses, es para celebrarla.

“El presidente García sabe de la importancia que tiene la venida de un rally así, que puede generar millones de dólares de ingresos en divisas, además de la (transmisión por TV) a decenas de países en todo el mundo. Se ha dado un paso importante para el deporte peruano, aun cuando el rally se va a disputar sin García como presidente y quizá yo mismo no esté más en el cargo”, afirmó.

Los aficionados celebraron la idea y ya lanzaron ideas como que la prueba termine en La Chutana, un espacio lo suficientemente grande como para albergar a los carros, camiones, cuatrimotos y motocicletas en competencia; otros piden que lleguen en enlace hasta la Plaza de Armas, donde se haría la gran ceremonia de entrega de premios.

El anuncio oficial de la incorporación del Perú al rally se haría el 16 de este mes, cuando la competencia del 2011 termine oficialmente en la avenida 9 de Julio de Buenos Aires.

CÁLCULOS
Un beneficio millonario
El cálculo más optimista revelado ayer por Woodman asegura que el Perú podría beneficiarse con unos 25 ó 30 millones de dólares de ingresos como consecuencia de la posible venida del tour del Dakar al país.

“La caravana de deportistas es de 800 a 100, incluyendo al equipo de servicio y mecánicos. Pero en el grupo van miles de personas, además de aficionados. Dejarán divisas al país en toda la zona sur y la transmisión nos pondrá en el centro del mundo, con los beneficios para el turismo receptivo”, dijo.