El escándalo desatado por la publicación de unas polémicas fotografías que mostraban las fiestas y orgías de los empleados de seguridad de la embajada de Estados Unidos en Kabul (Afganistán) ya tienen consecuencias.

La embajada norteamericana señaló que despidió a los ocho custodios que aparecían en las polémicas imágenes, en alguna de las cuales se les veía semidesnudos o bebiendo vodka vertido entre las nalgas de otro.

El Proyecto de Vigilancia Gubernamental envió una carta a la secretaria de Estado estadounidense, Hillary Clinton, en la que señalaba que guardias privados de la compañía de seguridad ArmorGroup América del Norte llevaban a cabo rituales de iniciación abusivos, poniendo en peligro la seguridad de los diplomáticos.

“Diez guardias vistos en las fotos ofensivas están dejando hoy el país, ocho fueron despedidos y dos reasignados. El equipo de dirección completo de ArmorGroup América del Norte en Kabul está siendo reemplazado de inmediato. La oficina de seguridad de la embajada continúa sus entrevistas a cada uno de los guardias de ArmorGroup”, señaló la embajada en un comunicado.

Una portavoz de la misión diplomática también señaló que se había prohibido a los guardias beber alcohol mientras estuvieran en Afganistán.

La carta a Clinton, junto con la falta de personal y otras carencias, denunció que la situación minaba la seguridad en el disperso complejo, en un momento en el que aumenta la violencia en Afganistán.

El mes pasado, grupos de insurgentes dispararon cohetes que aterrizaron cerca de la embajada y un suicida mató al menos a siete personas e hirió al menos a 100 cerca de sus puertas.