Aunque algunos podrán refutar esta teoría, la generalidad demuestra que en realidad la boda sí engorda


Al respecto hay varias explicaciones, pero la que casi todos ponen de manifiesto, es que una vez que la mujer o el hombre se casan, se relaja en varios aspectos y como la conquista ha dejado de ser una prioridad en sus vidas, el aspecto físico pasa a un segundo plano, llegando muchas veces a descuidar su imagen. Lo cierto es que esto es lo peor que se puede hacer.

Otros opinan que con la boda, más aún si se tienen hijos, el tiempo para dedicarle a la actividad física se ve disminuido y se come más porque generalmente en el hogar se cocina más o se sale más a comer con la pareja.


Sin embargo, un estudio publicado en el diario La Nación, indica que toda regla tiene su excepción pues de acuerdo a la investigación, las mujeres al casarse, suben entre 7 y 10 kilos en los diez años posteriores al matrimonio.

Se puede poner como excusa el hecho de engordar por los embarazos, como el principal motivo de este aumento de peso, pero el estudio dice que aunque no tengan hijos, las mujeres engordan lo mismo, incluso las que no los tienen, suben de peso más fácilmente que aquellas que sí lo tienen.

Pero también es cierto que con el embarazo, las mujeres naturalmente suben de peso y luego a muchas, se les hace muy difícil bajarlos, por más entrenadas que estén en la crianza de sus pequeños, y además los especialistas le adjudican la culpa del aumento de peso, más que a nada, a los cambios psicológicos que se dan en el embarazo o en la mujer que a dado recientemente a luz.

¿Qué pasa con los hombres?

Ellos tampoco se salvan de engordar durante el matrimonio, incluso los estudios realizados al respecto, demuestran que los varones engordan aún más que las mujeres, superándolas en por lo menos unos 3 kilos.

De esta manera, la nutricionista Mónica Katz, asegura que el matrimonio, es un factor de riesgo para la obesidad o el sobrepeso.

Y que “el casamiento, al igual que el embarazo o el posparto para las mujeres, es para muchos el puntapié inicial de la espiral metabólico-conductual que es la obesidad. Y una vez iniciada es difícil detenerla”.
Fuente: Terra